domingo, 13 de diciembre de 2015

Batatas "fritas" al horno


Desde que empecé a interesarme por la alimentación, no he parado de toparme con información relatitva a los beneficios de consumir carbohidratos complejos frente a los simples y es una tendencia que hoy en día está avalada por diversos estudios.

Hay muchas personas que temen a los carbohidratos y reducen mucho su consumo, En su justa medida y momento, los carbohidratos complejos acompañados de una porción de proteína no tienen porque favorecer la ganancia de peso, ya que nos ayudan a mantener los niveles de azúcar en la sangre, evitando que nos dé hambre al poco de comer. Lo que sí se suele recomendar es tomarlos en el desayuno o después de hacer ejercicio ya que es cuándo las reservas de glucosa están más bajas. No es intención de este blog hacer recomendaciones para bajar de peso pero mi experiencia me dice que esta regla funciona: tomar los carbohidratos complejos en la mañana y/o al medio día si has realizado ejercicio o si has tenido un gran desgaste de energía (como es el caso de los niños).

Pues bien la batata es considerada un carbohidrato complejo y aunque tenga sabor dulce tiene una carga glucémica más baja que las patatas. Además se le atribuyen muchas propiedades.

Y después de esta introducción, en la receta de hoy os propongo una forma deliciosa de consumirla tanto para adultos como para niños. Prueba a hacerla, te sorprenderá.

Ingredientes (4 personas):

  • 2 batatas medianas/grandes
  • Sal
  • Aceite de oliva
  • Especias al gusto, yo puse: romero, orégano y pimentón picante.

Preparación:


Pelar y cortar la batata con la forma deseada, si es ecológica puedes lavarla bien y dejarle la piel. Posibles cortes: gajos (con la piel quedan riquísimos), chips (se puede usar una mandolina, yo les tengo pánico así que uso el cuchillo), panaderas (más gorditas que las chips) y bastón (la más común). Yo en esta ocasión escogí el corte clásico o de bastón para que se asemejaran lo más posibles a las patatas fritas que tanto gustan a niños y mayores.

Precalentar el horno a 200º.

Introducir las batatas cortadas en un cuenco grande (que sobre espacio para luego mezclar bien), añadir la sal (usé sal marina, les da un sabor riquísimo), las especies deseadas (yo hice de dos tipos una para adultos con romero, orégano y pimentón picante y otra para niños con romero y orégano) y un chorreoncito de aceite de oliva. Mezclar todo bien, yo lo hago con las manos porque me da la sensación de que se integra mejor el aliño, además es como he visto a mi madre toda la vida hacerlo con las patatas fritas cuando les añadía la sal.

En una bandeja de horno sobre una lámina de papel vegetal o silpat disponer los bastones de batata y hornear hasta que estén dorados (20 minutos aproximadamente). Probar una para asegurarse que están en su punto, si es necesario dejar 5 minutos más.




Sacar del horno y comer calentitas. Acompañando a carnes a la plancha o asadas son una delicia. Mmmmmm...

Hoy hemos comido pollo asado en casa y mi hija menor (4 años) me ha preguntado, "mamá, ¿no hay patatas naranjas?"... :-D

Ricas fáciles y sanas.






















2 comentarios:

  1. Hola Ana, muchísimas gracias por todas tus recetas y consejos.
    Quería hacerte hacerte una consulta, como puedo conseguir que salgan crujientes?
    Muchas gracias! !

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  2. Hola Nuria, ese es un tema delicado, nunca van a quedar tan crujientes como fritas en aceite, pero un truco es ponerles la sal después de hacerlas, así salen más crujientes por fuera y tiernas por dentro. Las salas al servirlas. Otro truco es cortarlas en rodajas bien finas con un pelador o mandolina y al micro 2 minutos a potencia máxima, con cuidado que no se te quemen!

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