lunes, 21 de diciembre de 2015

Bolitas de Coco y Chocolate ligeras



Me encanta la Navidad por muchas razones. Porque es tiempo de ilusión, de compartir con la familia y amigos momentos especiales, de adornos que son una locura de bonitos, de luces que nos alegran un poco... la vida no es perfecta para nadie pero en Navidad al menos tenemos una escusa para sentirnos un poco más vivos, un poco mas amorosos, un poco mejores...

Y otra de las cosas que me encanta de la Navidad son los dulces navideños... pero claro están repletos de azúcares procesados, harinas blancas y grasas saturadas, así que esta semana siguiendo mi lema:

"Piensa en lo que más te gusta y busca una opción sana para disfrutar de ello"

me he propuesto hacer una versión un poco más sana de uno de mis dulces navideños preferidos: las bolitas de coco. 

Ingredientes (22 bolitas):


  • 2 tazas de coco rallado (lo compro en Mercadona)
  • 1/4 de taza de sirope de arce puro (maple syrup) - para la versión baja en calorías puedes usar sirope de arce sin azúcar (yo lo compro en Taste of America, pero lo hay en la mayoría de las herboristerías e incluso en grandes superficies). En este caso como las bolitas las van a tomar niños y mayores he optado por la opción no procesada (el sirope de arce es la savia del arce cocida hasta formar el jarabe). También puede ser miel.
  • 1/4 de taza de agua
  • 1/4 taza de aceite de coco (no tengáis miedo de compralo lo hay en cualquier herboristería y se le atribuyen muchas propiedades)
  • 190 gr. de chocolate negro puro (mínimo 70% de pureza) - para la versión baja en calorías puedes usar chocolate sin azúcar (yo uso el Valor con Stevia, ¡muy rico!)

Preparación:


En un bol de tamaño mediano-grande poner el coco.

En un cazo poner a calentar el sirope y el agua a fuego medio, esperar a que empiece a hervir y dejarlo durante 3-4 minutos para concentrar un poco la mezcla.

Derretir el aceite de coco (en invierno suele solidificarse) en un cazo a fuego bajo o en un bol en el micro. 

Incorporar el sirope caliente y el aceite de coco al coco rallado y mezclar muy bien hasta integrar todos los ingredientes.

Poner la mezcla en la nevera en la zona más fría. Dejar enfriar una hora mínimo para que tanto el sirope como el aceite se endurezcan y permitan formar las bolas.

Sacar la mezcla de la nevera y formar las bolitas cuál croquetas, apretando una porción dentro de la mano y dando la forma correspondiente.




Introducir las bolitas en la nevera mínimo media hora para que cuando las cubramos de chocolate éste se compacte fácilmente al contacto con la ellas.

Derretir el chocolate al baño maría o en el microondas en un recipiente hondo. Yo para derretirlo lo troceo en un bol y lo introduzco a potencia media-alta en el microondas hasta que empieza a derretirse, lo saco y lo muevo bien, si veo que queda alguna onza sin derretir a pesar de haber mezclado a conciencia, vuelvo a meter 20 segundos más, a sacar y a mover, hasta conseguir que todo el chocolate esté bien derretido. Tener mucho cuidado con no dejarlo calentar mucho porque el chocolate se quema fácilmente y ya no derrite bien. No incorporar agua, para conseguir una textura más líquida, puesto que se cortaría.

Sacar las bolas de la nevera y bañar en el chocolate fundido con la ayuda de dos cucharas. Situar las bolas que se vayan bañando en una bandeja cubierta de papel vegetal para luego poderlas despegar bien cuando se enfríen,



Una vez cubiertas todas las bolitas, introducir la bandeja en el frigorífico para que el chocolate se termine de endurecer.






Para consumir, sacar del frío con un poco de tiempo para que se templen y disfrutar!!!!


Volveré al blog con más recetas después de las fiestas aunque seguiré subiendo cositas a Instagram (bocados_fit) y a Facebook (Bocados fit)... estad atentos subiré ideas ricas, fáciles y sanas, ideales para estas fechas.

Os deseo unas Navidades tranquilas, disfrutad mucho y sobre todo os deseo mucho Amor...












domingo, 13 de diciembre de 2015

Batatas "fritas" al horno


Desde que empecé a interesarme por la alimentación, no he parado de toparme con información relatitva a los beneficios de consumir carbohidratos complejos frente a los simples y es una tendencia que hoy en día está avalada por diversos estudios.

Hay muchas personas que temen a los carbohidratos y reducen mucho su consumo, En su justa medida y momento, los carbohidratos complejos acompañados de una porción de proteína no tienen porque favorecer la ganancia de peso, ya que nos ayudan a mantener los niveles de azúcar en la sangre, evitando que nos dé hambre al poco de comer. Lo que sí se suele recomendar es tomarlos en el desayuno o después de hacer ejercicio ya que es cuándo las reservas de glucosa están más bajas. No es intención de este blog hacer recomendaciones para bajar de peso pero mi experiencia me dice que esta regla funciona: tomar los carbohidratos complejos en la mañana y/o al medio día si has realizado ejercicio o si has tenido un gran desgaste de energía (como es el caso de los niños).

Pues bien la batata es considerada un carbohidrato complejo y aunque tenga sabor dulce tiene una carga glucémica más baja que las patatas. Además se le atribuyen muchas propiedades.

Y después de esta introducción, en la receta de hoy os propongo una forma deliciosa de consumirla tanto para adultos como para niños. Prueba a hacerla, te sorprenderá.

Ingredientes (4 personas):

  • 2 batatas medianas/grandes
  • Sal
  • Aceite de oliva
  • Especias al gusto, yo puse: romero, orégano y pimentón picante.

Preparación:


Pelar y cortar la batata con la forma deseada, si es ecológica puedes lavarla bien y dejarle la piel. Posibles cortes: gajos (con la piel quedan riquísimos), chips (se puede usar una mandolina, yo les tengo pánico así que uso el cuchillo), panaderas (más gorditas que las chips) y bastón (la más común). Yo en esta ocasión escogí el corte clásico o de bastón para que se asemejaran lo más posibles a las patatas fritas que tanto gustan a niños y mayores.

Precalentar el horno a 200º.

Introducir las batatas cortadas en un cuenco grande (que sobre espacio para luego mezclar bien), añadir la sal (usé sal marina, les da un sabor riquísimo), las especies deseadas (yo hice de dos tipos una para adultos con romero, orégano y pimentón picante y otra para niños con romero y orégano) y un chorreoncito de aceite de oliva. Mezclar todo bien, yo lo hago con las manos porque me da la sensación de que se integra mejor el aliño, además es como he visto a mi madre toda la vida hacerlo con las patatas fritas cuando les añadía la sal.

En una bandeja de horno sobre una lámina de papel vegetal o silpat disponer los bastones de batata y hornear hasta que estén dorados (20 minutos aproximadamente). Probar una para asegurarse que están en su punto, si es necesario dejar 5 minutos más.




Sacar del horno y comer calentitas. Acompañando a carnes a la plancha o asadas son una delicia. Mmmmmm...

Hoy hemos comido pollo asado en casa y mi hija menor (4 años) me ha preguntado, "mamá, ¿no hay patatas naranjas?"... :-D

Ricas fáciles y sanas.